Logan
“Han pasado 17 años desde que inició la franquicia, y en esta ocasión llega quizá la mejor película en el universo de los X-Men, y con la cual Hugh Jackman se despide de una digna manera al personaje más icónico de su carrera, Wolverine”
Logan se desarrolla en el año 2029, un futuro no muy lejano en el cual los mutantes se han extinguido casi completamente; sin embargo, Logan se ve envuelto en una difícil situación en la que tendrá que llevar a Laura (una niña que podría ser una mutante) al otro lado del país. Ayudado por un profesor Xavier viejo y enfermo, se enfrentará con varios retos e incluso con su propia mortalidad.
Esta cinta está vagamente basada en el comic “Old Man Logan” y toma inspiración de películas del estilo western. La historia nos brinda un vistazo en la vida de Logan después de varias tragedias y los sucesos de las películas anteriores (las que entran en esa línea temporal).
La historia es relativamente sencilla, pues es un viaje de punto “A” a punto “B” con complicaciones. Aun así, es suficientemente compleja para evitar ser predecible y logra enganchar a la audiencia de principio a fin, pues el film se encuentra activo en su gran mayoría; incluso en la única escena en la que la narrativa se vuelve más lenta, es un momento profundo y significativo para los personajes.
En cuanto a efectos, es una película que los maneja de una manera impresionante, pues en vista de su clasificación C, utiliza un despliegue de efectos para mostrar la ferocidad y crudeza en cada escena de acción llena de violencia y sangre. Dicho esto, no es un festival de sangre como película de terror, pero muestra suficiente para impresionar y elevar la experiencia.
Las actuaciones en esta cinta, son bastante buenas, pues cada personaje se ve bien desarrollado y ninguno se siente fuera de lugar realmente. Es de notarse también, la gran actuación de la joven británico-española Dafne Keen, pues siendo su primera actuación en una película y al filmarla a sus 11 años, entrega una actuación bien trabajada y ciertamente impresionante. Más allá de ello, tanto Hugh Jackman como Patrick Stewart interpretan una versión cansada y desgastada de sus personajes por todos los eventos ocurridos hasta entonces; sin embargo, logran quizá la interpretación más humana y relacionable hasta ahora de ellos.
La música utilizada en la cinta, es sutil y adecuada, jamás robando atención de la escena ni dejando momentos de silencios incomodos. Ilustran de manera ideal el sentimiento de tensión, tristeza y calidez según sea el momento. De igual forma, la dirección de sonido es uno de los puntos altos con sonidos nítidos y claros, desde las voces hasta los sonidos de las garras, armas y cualquier objeto en escena.
La cinematografía es mayormente buena, sin embargo, cae en el ya conocido problema de cámara agitada en escenas de acción, que si bien no es en todas las escenas, sí está presente lo suficiente para ser notada. Fuera de ello, las tomas amplias y acercamientos son muy bien manejados, dando suficiente contexto y estando bien enfocadas.
Quizá el único problema de la cinta, es su villano sorpresa, pues sin intención de arruinar la película, se siente un poco improvisado y algo barato. Se entiende de donde viene la idea, pero es una oportunidad desaprovechada para lo que podría haber sido un villano sumamente memorable.
El director James Mangold, quien también dirigió “The Wolverine”, hace un muy buen trabajo de principio a fin, definitivamente superando con creces la película anterior.
Como nota importante y remarcada recomendación, sugiero que se vea la cinta en su idioma original, pues existen situaciones en las que ciertos personajes hablan en español por lo que quienes hablan inglés no lo entienden y dan contexto a la escena. De otra manera, prepárense para expresiones salidas de la calle como “llevar la troca”, “wachalo”, “te estás petateando” y “me bulleas”, las cuales arruinan el momento de la escena y causan más pena ajena que risa, ninguno de los cuales era la intención.
En resumen, Logan, con una duración de 2 horas y 17 minutos, es una digna despedida a un icono del cine, una cinta bien dirigida, llena de acción e incluso algo de sentimiento; con efectos impresionantes, actuaciones bastante buenas y lo que podría ser el inicio de una prometedora carrera para la joven Dafne Keen; esta es una cinta obligada para aquellos fanáticos de las películas de superhéroes e incluso cinéfilos en general. Su único problema es uno de sus villanos y quizá la conclusión abierta con la que cierra la cinta. Por todo lo anterior, se lleva una calificación de 4.5 estrellas de 5.
Etiquetas: Cine, José Estrada