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¿Qué es la intolerancia a la lactosa?

Cada día más personas sufren de intolerancia a la lactosa, un trastorno provocado por la dificultad que tiene nuestro organismo de digerir las sustancias lácteas y cuya ingestión provoca malestar en nuestro estómago y dolores a modo de cólicos, entre otros síntomas

¿Qué es la lactosa?

La lactosa es una azúcar que se encuentra en los lácteos y para que sea procesada correctamente, se necesita la enzima lactosa que tenemos todos los seres humanos en nuestros organismo al nacer. Pero conforme nos hacemos mayores el número de estas enzimas se reduce ya que nos hacemos omnívoros y dejamos de necesitar la leche materna. 

Esta es la principal causa de la intolerancia a la lactosa que muchas personas padecen.

Señales más frecuentes de intolerancia a la lactosa

Los signos más importantes que se manifiestan cuando tu cuerpo rechaza los alimentos ricos en lactosa como la leche, el yogur, el queso o los helados, son la inflamación del abdomen, dolores en el estómago frecuentes náuseas, diarrea y la presencia de gases estomacales.

En algunos casos hasta se puede producir la pérdida de peso sin haber hecho dieta, puedes sentirte más cansado de lo normal sin haber hecho aparente esfuerzo físico o puedes sufrir de fiebre o dolores al defecar. Una de las señales más reconocidas de padecimiento de intolerancia a la lactosa son los ruidos estomacales asociados con la distensión del vientre.También es muy común de que a la hora de ir al baño y al haber consumido algún producto con lactosa, las heces defecadas sean de un color mucho más oscuro que el habitual

¿Cuándo se manifiesta la intolerancia a la lactosa?

Estas señales de intolerancia a la lactosa pueden manifestarse el mismo día o al día siguiente del consumo del productor lácteo.

Si has padecido de algunos de estos signos y deseas saber si se debe a tu rechazo hacia la lactosa puedes dejar de consumir estos productos durante dos semanas y observar el resultado.

En el caso de que los síntomas desaparezcan es altamente probable de que seas intolerante hacia el producto, aunque existen personas con intolerancia aguda y otras con intolerancia moderada hacia productos lácteos, por ello la eliminación completa no dará los resultados deseados, además de que deberás aprender a compensar las vitaminas y minerales con la nueva dieta que incorpores.

¿Por qué es importante detectarla y tratarla rápidamente?

Porque la lactosa es una de las enzimas intestinales más delicadas y vulnerables.

Si seguimos tomando lactosa, se agrandará la lesión en la mucosa intestinal y se producirá un círculo vicioso: lesión de la mucosa/mal absorción de lactosa que será cada vez más difícil de solucionar.

Así que si sospechas de que puedes ser intolerante a la lactosa, debes visitar rápidamente a un gastro enterólogo que te hará un examen y una revisión para determinar la razón de tu malestar. Debemos tener siempre en cuenta que al ser unos síntomas muy generales ante la aparición de uno de ellos luego de tomar lácteos, es mejor acudir a nuestro médico y solicitar un análisis de intolerancia a la lactosa.

Y acudir con nuestro nutriólogo que nos enseñe que tipos de alimentos nos pueden estar causando mal y así adaptar un plan de alimentación que incluya calcio, vitaminas y minerales para no padecer carencias de nutrientes.

Lic. Nutrición. Egresada de la Universidad del Valle del Fuerte, práctica en Centro de Salud (Los Mochis), servicio social en Hospital Fátima S.A de C.V. Integrante del programa de comunidades saludables 2012, juego, me divierto y aprendo comiendo bien “por mi salud”.

Etiquetas: Nutrición, Judith Mendivil